1. HISTORIA
Si rastreamos la palabra “logo” podemos remontarnos a la Antigüedad. “Logo” proviene del griego, y según su etimología significó en un principio “palabra” o “discurso”. Luego adquirió el significado de marca y símbolo identificadores, además del de nombre. Un ejemplo del uso de logos en la época clásica se presenta en las monedas utilizadas por griegos y romanos, en las cuales éstos representaban a gobernantes o ciudades.
La creación de logos aumentó durante la Edad Media, período en el cual proliferaron aquellos destinados al uso comercial, artístico y eclesiástico. En la Baja Edad Media (es decir, el medioevo tardío) mejoró el diseño de los logos, especialmente el de aquellos empleados por los comerciantes para distinguir la mercadería. Otros logotipos de la época fueron las filigranas en los papeles (hechas por los fabricantes de papel y empleadas especialmente por la nobleza), las marcas de los orfebres en sus obras y los signos masónicos. Una novedad fue el uso de colofones, señales del impresor, editor, lugar y fecha de impresión incluidas al final de los libros.
Sin embargo, a pesar de estos antecedentes históricos, el logotipo tal como lo conocemos en la actualidad surgió con la Revolución Industrial, o sea, a partir de mediados del siglo XVIII (en Europa y EEUU). Ya para esta época la economía capitalista se encontraba en pleno desarrollo. Con la industrialización se produjo uno de los cambios más importantes de la historia a nivel social, económico, cultural y tecnológico.
La Edad Media y la Moderna presentan grandes diferencias. La economía medieval se caracterizó Continuar leyendo